Hoy es la luna llena mas hermosa que he visto en años. Me pregunto si alguien se ha dado cuenta.
El dolor me ha llevado a dar el último paso que necesitaba. No mas el niño que sueña, sino ser ahora el hombre que actua. Desgraciadamente un hombre sin corazón, sin un destino claro y con muchas llagas reflejadas en la mirada sincera.
Asumo que no caeré, asi que no puedo quedarme quieto.
Te recuerdo, es imposible que no lo haga... marcaste mi vida y en algún lugar de mi alma, mientras el hombre lucha por olvidarte, un niño ruega a un Dios que no lo escucha que te encuentres bien, que salgas adelante.
Érase una vez un ángel que aprendí a amar. El tiempo paso, cerró las heridas y me enseñó a vivir... el precio a pagar fue arduo... ella se llevó mi inocencia, mis sueños puros y mi veta de bondad amante.
Érase una vez un hada que aprendí a amar. El tiempo aún no ha pasado y no ha cerrado las heridas, pero solo asi logré dar el paso que me sacara de una eterna pubertad a una oscura adultéz. No mas objetivos de ser feliz, el sueño cambia por un simple y humilde "estar bién". El precio a pagar fue duro... ella se llevó mi última esperanza romántica y mi confianza en el ser humano.
No he de quejarme. Son regalos que he entregado al mundo, y lo volvería a hacer mil veces ya que es el camino que alguien debía recorrer, y me tocó a mi hacerlo.
La melancolía me embarga... pero soy un hombre, y un hombre de verdad no posee deseos, sino voluntades.
Hoy es la luna llena mas hermosa que he visto en años... me pregunto si también la has visto.
El dolor me ha llevado a dar el último paso que necesitaba. No mas el niño que sueña, sino ser ahora el hombre que actua. Desgraciadamente un hombre sin corazón, sin un destino claro y con muchas llagas reflejadas en la mirada sincera.
Asumo que no caeré, asi que no puedo quedarme quieto.
Te recuerdo, es imposible que no lo haga... marcaste mi vida y en algún lugar de mi alma, mientras el hombre lucha por olvidarte, un niño ruega a un Dios que no lo escucha que te encuentres bien, que salgas adelante.
Érase una vez un ángel que aprendí a amar. El tiempo paso, cerró las heridas y me enseñó a vivir... el precio a pagar fue arduo... ella se llevó mi inocencia, mis sueños puros y mi veta de bondad amante.
Érase una vez un hada que aprendí a amar. El tiempo aún no ha pasado y no ha cerrado las heridas, pero solo asi logré dar el paso que me sacara de una eterna pubertad a una oscura adultéz. No mas objetivos de ser feliz, el sueño cambia por un simple y humilde "estar bién". El precio a pagar fue duro... ella se llevó mi última esperanza romántica y mi confianza en el ser humano.
No he de quejarme. Son regalos que he entregado al mundo, y lo volvería a hacer mil veces ya que es el camino que alguien debía recorrer, y me tocó a mi hacerlo.
La melancolía me embarga... pero soy un hombre, y un hombre de verdad no posee deseos, sino voluntades.
Hoy es la luna llena mas hermosa que he visto en años... me pregunto si también la has visto.
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